Camry es sin duda un sinónimo de mucho éxito para Toyota. La compañía japonasa ha manufacturado hasta la fecha alrededor de 15 millones de unidades alrededor de 100 países desde su debut en 1983. Su éxito ha hecho que éste sea visto como un vehículo a tomar en cuenta como patrón por competidores como Hyundai o Nissan para diseñar los vehículos dentro de este segmento.
El nuevo Camry sin duda continua con un diseño muy deportivo, similar al mostrado en el 2011. Las líneas pronunciadas le dan un estilo mas cosmopolita, manteniendo siempre esa apariencia muy propia de este vehículo. Sin embargo, este año el modelo presenta un nuevo diseño de parachoques frontal, con focos anti neblina redondos. Con esto la compañía garantiza un refrescamiento, de acuerdo a nuevas tendencias.
Para este año el modelo se comercializa en versiones L, LE, XLE y SE. Este último viene todas las extras, además de una mayor presencia de elementos bañados en cromo. A nivel de neumáticos, el Camry arranca con aros 16 pulgadas con copas de plástico, las opciones de 17 (presnetes en L, LE y XLE) vienen con aros de lujo mientras que la opción 18 pulgadas se comercializa únican en la edición SE.
A pesar de que el aspecto externo no varió mucho, Toyota si trabajó fuerte para mejorar la cabina a través de un aspecto mas abierto. Se variaron varios aspectos en el dashboard, panel de control así como controles latereales ubicados en las puertas. Esta luce mas amplia, con mayor espacio. Un total de tres sistemas de audio estan disponibles, iniciando con sistema AM/FM/CD con pantalla LCD de seis parlantes. También destaca otro sistema de audio el cual entrega un sonido 6.1 con pantalla táctil y radio de alta definición, iTunes y sistema de navegación.
En el aspecto mecánico, Toyota no varió mucho su arsenal. Este ofrece el mismo motor 2.5 litros en gasolina del 2011. Este se caracteriza por poseer una potencia de 178 caballos de fuerza a 6000 rpm ademá de 170 libras-pie de torción a 4100 rpm. Este continúa dando esa acceleración sutil sin ruidos y vibraciones. Si esto no le es suficiente, tal vez pueda optar por el motor 3.5 litros V6 con mejora en el uso de combustible. Ambos vienen acompañados por una transmisión automática de seis velocidades.
Al final de cuentas el Camry 2012 logra mantenerse sin dar mayores sorpresas. Unos cuantos retoques hechos por Toyota con el afán de ajustarlo a la actualidad del mercado es lo único que el comprador encontrará. Espere nuestra reseña completa la cual publicaremos próximamente.
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